El niño de este Norte
es bondadoso y soñador
como un tesoro de ternura
siembra su semilla para que brote
en el desierto una nueva flor.
El niño de mi Desierto
resplandece como el relámpago,
iluminando el porvenir con amor.
El niño de mi Norte
camina sendero de Paz;
sueña ser Poeta
y cantar como la Tierra
a la humanidad.
Milena Ortiz Macaya
Antofagasta
Pleno de ternura y esperanzador este poema que ensalza la paz.
ResponderEliminarFelicitaciones,Milena.
Hermoso poema!
ResponderEliminarHermoso poema!
ResponderEliminarMagnífico! Felicitaciones!
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